Soria en el Corazón
Tu Fuego es como un Ardor
que te llega de dentro
y abre sus manos hacia
el Infinito.
Soria:
te sigo aquí.
Te sigo en La Revolución.
En Los Despertares de Los Comunes
No hay tierra para ti.
Hay Tierra para ti.
En El Despertar.
Del Común.
Del mundo Entero.
En el comunero.
Paz y Amor.
En La tierra del Duero
Son tus voces,
son tus cantos,
en La Belleza del Duero
está tu Dignidad.
Te beso,
te deseo,
¡oh, corazón hinchado!
En tus deseos está
La Flor de una juventud
que algún día
madurará,
y se hará La Voz,
se hará La Voz
de este Mundo
que, no corrompido,
sale como Las Llamas
de Un Viejo Ejercito
a buscar Las Posesiones
de La Vieja Atlántida,
en su círculo concéntrico.
Te amo,
hasta El Amanecer.
El Castillo Arruinado por Los franceses
En bombas.
Digámoslo en bombas.
El Castillo cayó entre bombas.
Los franceses no vinieron.
El Castillo fue arruinado
por las bombas.
Una brizna de Trigáceo
En una pequeña tormenta,
encontré un campo de trigáceo,
procuré no pisarlo,
y, él, se me pegó a los calcetines.
Caminé hasta un descampado,
y, allí, me quité el trigáceo;
¿de dónde?:
de los calcetines.
Volví a casa,
y había trigáceo.
¿Dónde?:
en los calcetines.
-Richie punk-