El joven saharaui, Said Uld Sidahmed Uld Abdelwahad, de 26 años de edad, más conocido por Dambar, residente en el barrio de Casapiedra del Aaiún, licenciado en economía y trabajador del ayuntamiento, se encuentra en estado clínico de coma, con muerte cerebral, en el Hospital BEN EL MEHDI del Aaiún, por el disparo entre los ojos que le ocasionó un policía marroquí.
Sobre las 02:30 hrs. de la madrugada del 22 de diciembre, la policía denominada “los croatas”, de los GUS, junto con policías vestidos de paisano de los servicios secretos marroquís, se personaron en el domicilio de la familia de Said, dando fuertes golpes en la puerta para notificar la noticia, que les proporcionasen la documentación de la víctima y les acompañase el hermano mayor, al que introdujeron en un coche y lo llevaron a presencia del gobernador de El Aaiún, el cual le comunicó y confirmó que su hermano había recibido un disparo entre los ojos de un policía y que se encontraba en estado muy grave en el hospital.
El gobernador le instó a que no comunicasen el hecho a nadie para solucionarlo de forma privada.
El hermano sufrió la conmoción de la grave noticia y al desplazarse inmediatamente al hospital donde se encuentra la víctima pudo, junto con su familia, conocer el estado crítico en que se encuentra Said.
Allí, en el hospital, se encuentra mucha población saharaui y el hospital está acordonado, con numerosa presencia de policía, gendarmería real y otras fuerzas de la ocupación marroquí.
Desde Resistencia Saharaui, denunciamos el uso indiscriminado y desmedido de las fuerzas de ocupación contra la población civil desarmada, que ha provocado numerosos muertos, heridos, detenidos y desaparecidos, siendo Said el último episodio que está viviendo el pueblo saharaui de esta brutal agresión.
Denunciamos igualmente que la Comunidad Internacional y los organismos competentes han abandonado al pueblo saharaui que se encuentra a merced de las fuerzas de ocupación marroquíes, instando a la Comunidad Internacional a que exija a Marruecos la investigación de esta agresión y se deslinden las responsabilidades sobre el Reino de Marruecos por las mismas.
Estos acontecimientos ante los tratados de Ginebra confirma el cese al fuego pactado en 1991 por Marruecos y el Frente Polisario para la realización del referéndum de autodeterminación que demanda el pueblo saharaui.
Y seguimos gritando que la indiferencia y la pasividad de los países los convierte en cómplices de estas violaciones a los derechos humanos.
¡Basta ya! Justicia para el pueblo saharaui.
